jueves, 23 de agosto de 2007

Revelaciones 2, por Santo Tomás de Equino


El inspirado escolástico que reencarnó en Mr. Ed nos legó sus 5 consejos sobre cómo convertirse en un excelente filósofo o perecer en el intento, apaleado por una horda de gente sensata.

1- Explique los conceptos básicos de su teoría de un modo casi ininteligible. Por ejemplo, no diga "Dios es irracional", sino "El concepto que alberga la construcción discursiva que da nombre a ese único ente omnipotente, omnipresente y omnisciente es, dende un punto de vista gnoseológico, incompatible con las estructuras racionales de pensamiento occidental secularizado". Asimismo (esa palabra garpa mucho), mientras alarga inneceariamente el discurso, contráigalo por partes, para que la lectura sea difucultosa para el lector desprevenido. Elija dos párrafos y condénselos en una oración, ayudándose de adverbios y salvando palabras como "ontología", "hermenéutica", "reificación" y "guinzburg".

2-En lo posible, intruduzaca al menos una vez por párrafo una fecha o una referencia a un período histórico. Esto asegurará que hasta el lector menos formado reconozca que usted posee conocimientos vastos. (Secreto: Para hacer alusión a un siglo, es preferible hacerlo adjetivamente. En lugar de decir "el positivisto del siglo XIX", diga "el positivismo decimonónico").

3-Utilize lo más seguido posible términos transliterados del griego y del latín. Un truco muy popular es, cuando no se sabe como diferenciar un fenómeno por su rareza y no se alcanzó una comprensión clara acerca de su particularidad, definirlo como "sui generis". Da la impresión de disipar las dudas, pero solo significa "muy especial".

4- Cuando esté dando una conferencia y pierda la elocuencia por un período breve de tiempo, enuncie, al reanudar el discurso, un mínimo de dos sinónimos aparte del término que intentaba pronunciar inicialmente: "El pensamiento cartesiano es.... eh... digamos.... Secular, laico si se quiere... e incluso pagano."

5-Invente, de vez en cuando, una palabra.

Ahora incluiré un ejemplo, que no es más que un discurso vano acerca de la existencia de Pitufo Hernández:

" Reconstruír la genealogía de los mitos urbanos a partir de la figura indiscutiblemente pagana del Pitufo Hernández, es una tarea sumamente obscura y hermética para aquellos que desconocen la propia esencia del sujeto. Desde un punto en el que la teleología se confunde con la ontología, el pitufo es a priori existente como tradición mitológica y su rechazo a posteriori no es sino la negación secular de los procesos cognitivos occidentales orientados desde el positivismo decimonónico. Esta despitufización implacable nos desprende de aquello que define el lógos urbano en términos de su realización. Hernández no es sino necesariamente, del mismo modo en que es Dios, Crónica TV y la gallinita rellena de licor."


PD: Enfrentar contrarios agrega un plus buena onda. ( "Este posteo representa la improductiva creatividad del un hombre absolutamente inspirado y completamente falto de inspiración.")